domingo, 22 de mayo de 2011


pesca de arrastre

Camarones, gambas y langostinos

Estos crustáceos pueden tener dos orígenes: salvajes o cultivados. En el primer caso se capturan mediante la pesca de arrastre, en la cual caen accidentalmente todo tipo de peces sin valor comercial que luego son arrojados muertos. Cuando las redes de arrastre tocan el fondo marino destruyen los corales, acción equivalente a arrasar la selva con un buldócer para capturar unas cuantas especies. Se trata no solamente de un derroche de recursos sino de un verdadero atentado ambiental.

La situación no mejora cuando estos crustáceos se obtienen mediante la acuicultura, pues con ella se desplaza a las poblaciones locales y se destruyen ecosistemas costeros como los manglares. Por otro lado, el abuso de antibióticos en la acuicultura (pero también en la cría de aves, cerdos y vacas) está generando un problema de resistencia bacteriana por el cual las infecciones se vuelven cada vez más difíciles de tratar. El abuso de numerosos productos fitosanitarios en estos criaderos representa una causa de contaminación del mar y un riesgo para la salud de los consumidores.

Pesca de arrastre

La asociación Slow fish advierte que la mayor parte de estos crustáceos "proviene de la pesca de arrastre en aguas intermedias o profundas, un método que causa considerables capturas incidentales. De hecho, la red de arrastre destroza todo aquello que encuentra a su paso: se trate de peces, escualos, tortugas de mar amenazadas o en riesgo de extinción, ejemplares jóvenes, o cualquier otro tipo de vida marina, todo aquello que se iza a bordo termina por ser arrojado, muerto o agonizante, de nuevo al mar".

El departamento de pesca de la FAO señala "la pesca de arrastre del camarón como la principal fuente de descartes, pues representa el 27,3 % (1,86 millones de toneladas) de la estimación total de descartes en la pesca de captura mundial. La tasa conjunta o ponderada de descartes para todas las pesquerías de arrastre del camarón es del 62,3 %, un porcentaje muy elevado en comparación con otras pesquerías."
Acuicultura

En un artículo titulado "El precio oculto del marisco" El País advierte que "el 25% de la superficie que ocupaban los manglares ha desaparecido en los últimos 20 años, fenómeno asociado al establecimiento de las conocidas piscinas camaroneras. En total se han perdido alrededor de cinco millones de hectáreas de este tipo de ecosistemas. Asimismo, este tipo de cultivo demanda un uso intensivo de productos químicos, desde fertilizantes hasta pesticidas, pasando por antibióticos o desinfectantes".

Por todas estas razones, la WWF clasifica al langostino como producto no recomendado en su guía de consumo responsable de pescado. Por su parte, Greenpeace desaconseja el consumo de langostinos en su lista roja de especies pesqueras. Slow Fish también incluye las gambas y camarones entre los productos a evitar.

Links
1. Química y acuicultura: el ejemplo de los langostinos.
2. Productos químicos utilizados en la industria camaronera.
3. Impactos sociales y ambientales nocivos de la acuicultura.
4. Greenpeace ¿Quién paga el precio del langostino?
5. Pesca de camarón, amenaza para las tortugas en Costa Rica (vídeo).
6. Muerte de 15 mil tortugas por pesca de camarón en Costa Rica (vídeo).
7. Descarte de la merluza en la pesca del camarón en Argentina: "Depredación pesquera" (vídeo 1/ vídeo 2).
8. El país: vídeo de un barco arrojando peces muertos por la borda y artículo asociado.

No hay comentarios: